miércoles, 13 de marzo de 2013

CORRIENTE GALVÁNICA

Corriente Galvánica
Utilizamos un tipo de corriente que, además de continua, es ininterrumpida y de intensidad constante. A esta corriente se la denomina galvánica. En cuanto a sus características físicas, la corriente galvánica es de baja tensión (60-80 V) y baja intensidad, como máximo 200 mA. Se le denomina también constante, porque mantiene su intensidad fija durante el tiempo de aplicación.
En la aplicación de la corriente galvánica se distingue la fase de cierre del circuito, en que la corriente aumenta su intensidad de modo más o menos brusco, hasta alcanzar la previamente establecida; la fase o estado, estacionaria, de intensidad constante, que constituye la auténtica corriente galvánica, y la de apertura del circuito, al final de la aplicación, en la que la intensidad de la corriente desciende a cero.
Existen dos formas fundamentales de producción de corriente galvánica: mediante la utilización de pilas o baterías recargables, o mediante la rectificación de la corriente alterna de la red
Los generadores de corriente galvánica tienen dos terminaciones o polos: uno se denomina polo positivo y el otro polo negativo. En los aparatos utilizados en terapéutica, vienen diferenciados por colores (rojo el positivo o ánodo, y negro el negativo o cátodo) y el conmutador de polaridad tiene tres posiciones: + la derivación roja es positiva con respecto a la negra; - la derivación roja es negativa con respecto a la negra; 0 no se suministra corriente.






Efectos
El flujo de corriente eléctrica a través de un medio biológico conductor origina tres efectos básicos: electrotermal, electroquímico y electrofísico
·         Electrotermal: El movimiento de las partículas cargadas en un medio conductor produce microvibración de dichas partículas. Esta vibración y las fuerzas friccionales asociadas originan la producción de calor. A su paso por el organismo, la corriente galvánica provoca, sólo en muy pequeña proporción, la aparición de calor.
·         Electroquímico: En su estado puro (destilado), el agua no conduce la corriente eléctrica. Sin embargo, cuando se disuelven sustancias ionizables (como ácidos, bases, sales…), éstas se disocian en iones. Las soluciones resultantes, llamadas electrólitos, son capaces de conducir una corriente eléctrica en virtud de la migración de los iones disociados. El fenómeno de la conducción de carga eléctrica a través de los electrólitos recibe el nombre de electrólisis, que tiene lugar si el campo eléctrico tiene siempre el mismo sentido.
Cualquiera que sea el electrólito empleado, se comprueba que los productos de descomposición de la electrólisis aparecen siempre en los electrodos y nunca en el propio líquido. Los iones alejados de la nube de carga experimentan una reducción del gradiente de potencial, y su migración es más lenta. Este fenómeno se conoce con el nombre de polarización del electrodo; se observa, sobre todo, con electrodos de metal inerte, como los de platino.
El comportamiento fisicoquímico del cuerpo humano, compuesto en más del 80% por agua y electrólitos, al paso de la corriente eléctrica es similar al de una disolución de cloruro sódico, iones ambos que se dan más abundantemente que cualesquiera otros en el organismo.
·         Electrofísico: Los efectos electrofísicos, a diferencia de los electroquímicos, no ocasionan cambios en la configuración molecular de los iones. En el organismo existen moléculas cargadas eléctricamente (proteínas, lipoproteínas…), que, con el paso de la corriente galvánica, pueden migrar hacia uno de los polos, sin que la corriente produzca ningún cambio en la configuración molecular. La principal consecuencia de este movimiento iónico es la excitación de nervios periféricos, donde, en presencias de una carga adecuada, el sodio y el potasio se mueven a través de la membrana celular. Estos efectos celulares directos pueden originar muchas respuestas indirectas distintas, como contracciones de musculatura lisa o esquelética, activación de mecanismos analgésicos endógenos y respuestas vasculares.
La cataforesis consiste en partículas cargadas positivamente, que se desplazan hacia el polo negativo o cátodo (situación más habitual). La anaforesis; por su parte, son partículas cargadas negativamente, que se desplazan hacia el polo positivo o ánodo. El conjunto de cataforesis y anaforesis constituye la electroforesis.
En las zonas de entrada y salida de la corriente, a nivel de los dos polos o puntos de aplicación de los electrodos, se producen una serie de alteraciones que reciben el nombre de efectos polares.
Origina también una serie de alteraciones en todo el territorio orgánico que atraviesa entre los dos electrodos de aplicación. Son los efectos interpolares.
Efectos polares:
En el electrodo positivo, donde van los aniones (prototipo Cl-), se produce una reacción ácida, con liberación de oxígeno. Si el electrodo es grande y esponjoso es poco intensa, pero si la concentración de ácido es excesiva puede originar fenómenos de irritación e incluso destrucción química-tisular, produciendo electrolisis ácida.
Se produce un rechazo de los iones positivos que penetran el organismo, electroforesis o iontoforesis.
Se producen de manera secundaria fenómenos locales de tipo sedante y vasoconstrictor.
En el electrodo negativo, donde acuden los cationes (prototipo Na+), se produce una reacción alcalina, con liberación de hidrógeno. Si la densidad de corriente es elevada se concentrará en exceso el álcali, lo que dará lugar a irritaciones y destrucción tisular, electrolisis alcalina.
Se produce rechazo de los iones negativos hacia el interior del organismo, iontoforesis.
Polo positivo: Reacción ácida, Libera oxígeno, Quemadura ácida, Coagulación, Rechace iones +, Vasoconstricción y Sedación
Polo negativo: Reacción alcalina, Libera hidrógeno, Quemadura alcalina, Licuefacción, Rechace iones -, Vasodilatación y Excitación
Efectos interpolares:
·         Hiperemiante, aumenta el aporte de oxígeno y sustancias nutritivas a los tejidos y una aceleración en la eliminación de los productos de desecho del catabolismo celular.
·         El aumento de circulación sanguínea y permeabilidad de las membranas celulares facilita la reabsorción de líquidos retenidos, favoreciendo la absorción de edemas y disminuye el éxtasis circulatorio.
·         •Las reacciones bactericidas y antiinflamatorias son reforzadas.
·         Trófico.
·         Térmico, que además aumenta las secreciones glandulares.
·         Sobre los nervio sensitivos, de forma analgésica.
·         Sedante.
·         Tónico y de aumento de la excitación motriz.
·         Sobre el sistema nervioso central. Cuando la corriente atraviesa el sistema nervioso de forma ascendente, cátodo en posición craneal, se produce efecto tónico. Cuando la corriente pasa en sentido descendente, ánodo en posición craneal, se provoca efecto hipotónico y sedante.
Montaje
Los aparatos para la aplicación de corriente galvánica deberán tener: una fuente de energía, un reóstato que permita variar su intensidad, un miliamperímetro que indique la intensidad de la corriente circulante en cada momento por el circuito y unos aplicadores. Para conectarlos, el aparato dispone de unas salidas con indicación de la polaridad positiva o negativa y, en ocasiones, de un inversor, de modo que, si éste no actúa, la polaridad de los aplicadores sea la indicada en el aparato y, si se hace funcionar, la inversa.
A estas salidas se conectan los cables que tienen en su extremo los electrodos para acoplar al enfermo. Dado que, para que la corriente galvánica realice su efecto terapéutico, el enfermo debe introducirse en el circuito eléctrico, los electrodos deben permitir la fácil entrada y salida de la corriente eléctrica en el organismo, atravesando la resistencia que opone la piel. Para ello se construyen en forma de láminas metálicas de estaño, recubiertas de una almohadilla plástica esponjosa que se humedece con agua caliente y se fija con gomas a la zona que hay que tratar. También pueden utilizarse para galvanización electrodos flexibles, como los utilizados en electroestimulación neuromuscular.
Otra forma muy adecuada de aplicar la corriente galvánica es sumergiendo la totalidad del individuo, o sólo la parte que vaya a tratarse, en agua, y colocando en su inmediata cercanía los electrodos. El agua, como es bien sabido, disminuye enormemente la resistencia eléctrica de la piel y favorece la penetración de la corriente. Esta disposición se denomina «baños galvánicos», los cuales pueden ser totales o parciales.




Aplicación
·         Directa: los electrodos se aplican sobre la superficie corporal.
·         Indirecta: mediante cubetas o electrodo húmedo. Cuando se utiliza el agua como electrodo, se aplica por medio de baños totales o parciales. El tamaño del electrodo es igual a la superficie de piel que contacta con el agua.
El baño total es el llamado baño galvánico, en el que se introduce al paciente en una bañera que lleva incorporados numerosos electrodos. Éstos permiten escoger la zona de paso de corriente a través del cuerpo o hacer un tratamiento general. Al utilizar agua, podemos alcanzar dosificaciones más altas (15-20 mA).
Para la aplicación del baño parcial, se utilizan cubetas de material no conductor, con tamaño y forma variables, adecuados al miembro que hay que tratar. Se llena de agua caliente (32-36 ºC). Se disuelve una pequeña cantidad de cloruro sódico para mejorar la conductibilidad. Situamos un electrodo en el interior de la cubeta, que se coloca detrás de una tablilla de madera agujereada, con el fin de que pase la corriente y proteger al paciente.




Indicaciones
·         Activación de la cicatrización de heridas. Se utiliza para tratar úlceras dérmicas poco irrigadas; permite una cicatrización acelerada.
·         Activación de la cicatrización de fracturas, en la que existe retardo en la consolidación.
·         Como terapia previa a los tratamientos con corrientes variables, en los casos de parálisis periféricas, debido al aumento de excitabilidad neuromuscular.
·         Por su efecto analgésico en neuritis, neuralgias, mialgias…
Contraindicaciones
·         Endoprótesis y osteosíntesis: Dada la conductividad de los metales, se acumularán en él cargas eléctricas que lo convertirán en un pseudoelectrodo. Los metales son buenos conductores y no oponen resistencia por lo que no existe el riesgo de quemadura por acumulo de calor en él.
·         Marcapasos: Aparatos de precisión, necesarios para el control cardíaco. Debe evitarse que el ritmo de los impulsos producidos por él se vea afectado por cualquier interferencia eléctrica. Si la cubierta del marcapasos es metálica, deben tomarse en cuenta las indicaciones mencionadas para los metales.
·         Problemas cardíacos: Cuando el sistema generador de impulsos cardíacos se encuentra afectado por diversas patologías, la influencia de campos eléctricos puede alterar el ritmo y la aparición de extrasístoles o ausencias extemporáneas de latidos.
·         Embarazo: Se contraindica la aplicación de todo tipo de corrientes con el fin de influir lo menos en el proceso de gestación.
·         Tumores malignos: Los procesos electroquímicos generados por la aplicación de la corriente, pueden contribuir a un mayor descontrol del metabolismo y reproducción de las células malignas, favoreciendo el proceso patológico
·         Tromboflebitis: El trombo puede aumentar de tamaño.
·         Precaución en zonas próximas a glándulas endocrinas: En el tratamiento debe tenerse en cuenta su proximidad para no provocar efectos a nivel general que no son buscados ni deseados.
·         Piel en mal estado o con heridas: La presencia de lesiones en la piel provoca concentración excesiva de la energía eléctrica, con el riesgo inminente de quemadura.
·         Alteraciones de la sensibilidad del paciente: Debe observarse cuidadosamente la respuesta neurovegetativa del paciente a la aplicación de la corriente. Si el paciente no puede responder a las alteraciones electroquímicas se corre el riesgo de quemaduras.
·         Precauciones ante respuestas neurovegetativas exageradas: Observar si el paciente durante las primeras sesiones hace una respuesta alérgica ante el galvanismo o si las respuestas neurovegetativas generalizadas o locales son exageradas. Por esto se recomienda siempre que las primeras sesiones sean con dosis bajas y tiempos cortos.
Desincrustación
La desincrustación es la utilización de la corriente galvánica para realizar una limpieza de forma profunda por exceso de grasas.
Esta técnica está basada en la reacciones de saponificación, consiste en aplicar una disolución de una sustancia alcalina mezclada con los ácidos grasos de la piel crean un reacción que produce jabón y que es fácil eliminar con agua.
Para que se produzca la mezcla del álcali (sustancia desincrustante) y el ácido graso necesitamos la corriente galvánica, ya que la sustancia desincrustante como puede ser una disolución al 10% de bicarbonato sódico o cloruro sódico (sal común) o una disolución al 5% de carbonato sódico, todo ello es de polo negativo y con el polo negativo de la corriente hacemos que penetremos en la piel y se fusione con la grasa, se produce la reacción química y crea jabón que finalmente es fácil de arrastrar y eliminar de la piel.
·         Intensidad 1 a 1´5 mA
·         Tiempo 3 o 4 min
·         No más de 15 a 20 días entre sesiones
No se puede abusar de esta técnica, ya que puede producir el efecto rebote, ya que la piel está acostumbrada a tener un nivel de grasa, si la quitamos en exceso, nuestro cuerpo detectará la necesidad, generando más cantidades de grasa.
La técnica de aplicación es igual que las de la ionización.
Indicaciones:
·         Seborrea
Contraindicaciones:
·         Varices personas sensibles a la corriente electrca, marcapasos cardiaco,embarazos o diu,y personas anestesiadad.
·         Endoprótesis y osteosíntesis. Marcapasos. Problemas cardíacos. Embarazo. Tumores malignos. Tromboflebitis.
·         Precaución en zonas próximas a glándulas endocrinas. Piel en mal estado o con heridas. Alteraciones de la sensibilidad del paciente. Precauciones ante respuestas neurovegetativas exageradas.
Iontoforesis
Consiste en el aprovechamiento de la corriente galvánica para introducir determinadas sustancias en el interior del organismo. Es condición necesaria que la sustancia que se quiera utilizar se disocie en iones.
Se pueden emplear iones que tengan una carga negativa, colocados en el cátodo (electrodo -), o bien iones que tengan carga positiva en el ánodo (electrodo +).
La zona a tratar debe estar completamente limpia para que la solución a ionizar penetre correctamente. El electrodo activo debe empaparse del producto ionizable, si éste es escaso o está muy concentrado puede mezclarse con agua destilada. El electrodo de retorno se humedecerá con suero fisiológico.
Las placas deben adaptarse perfectamente a la zona a tratar.
Todos los elementos utilizados deben lavarse cuidadosamente, para evitar depósitos que afecten a posteriores tratamientos.
Antes de cualquier maniobra es necesario bajar todos los mandos a 0.
Parámetros:
·         Corporal.
o    Tiempo por sesión. Mínimo 15'. Máximo 30'.
o    Intensidad. La intensidad y polaridad debe especificarlas el fabricante, aun así nunca se excederán los 0.05 mA / cm2 de placa y en ningún caso si se supera el umbral doloroso de la persona a tratar.
·         Facial.
o    Tiempo por sesión. 15'.
o    Intensidad. 0.05 mA / cm2. No exceder de 1 mA.
·         Senos.
o    Tiempo por sesión. 20'.
o    Intensidad. 0.05 mA / cm2. No exceder de 1 mA.
·         Estrías.
o    Tiempo por sesión. 1' / 10 cm2
o    Intensidad. 0.05 mA / cm2. No exceder de 1 mA.
Cuando se realiza una iontoforesis la aplicación de los electrodos es bipolar. El cosmético se colocará según su polaridad bajo el electrodo del mismo signo al que denominaremos electrodo activo. Al otro electrodo, que cerrará el circuito, se le denomina electrodo masa o indiferente. Al realizar la iontoforesis con una corriente galvánica será importante comprobar las dimensiones del electrodo negativo. La posible reacción alcalina que tiene lugar en este electrodo negativo o cátodo o es mucho más cáustica para la piel que la que podría tener lugar en el ánodo o electrodo positivo. Como regla general en la aplicación de iontoforesis, la superficie del electrodo negativo o cátodo debe ser doble a la del positivo o ánodo, ya sea el cátodo electrodo activo o indiferente.
Habrá que tener en cuenta que mientras ocurre la aplicación electroforética también actúa el efecto anestésico o analgésico de la corriente galvánica. Esta analgesia puede enmascarar una posible quemadura eléctrica solamente perceptible una vez concluido el tratamiento
Montaje
·  Se prepara al paciente que va a ser tratado y en particular la zona específica donde se va a realizar la aplicación, que debe estar completamente limpia para esta técnica.
·  En estos tratamientos el producto podrá colocarse en una esponja o gasa que recubra el electrodo, pero también se puede repartir directa y uniformemente sobre la piel de la zona a tratar, pasando a continuación el electrodo activo por contacto directo. El electrodo metálico hay que mantenerlo en contacto directo con la piel, es muy importante que se mantenga en continuo movimiento, pues de otra forma podrían producirse quemaduras.
·  Si el producto a ionizar es positivo, se conecta el electrodo que lo contenga al polo positivo y el electrodo pasivo al cable negativo y viceversa.
·  Se colocan los electrodos sobre la zona a tratar
·  en ningún caso, la intensidad indicada deberá sobrepasar el umbral doloroso de la persona a tratar.
·  Si así fuese, y para evitar accidentes, deberá bajarse la intensidad de la corriente y aumentar proporcionalmente la duración de la sesión. El resultado es el mismo.
·  Si se trata de un producto bipolar, una vez bajada la intensidad a cero, se cambia la polaridad y se vuelve aumentar la intensidad unos minutos.
·  Finalizado el tiempo de aplicación, se baja la intensidad sin retira los electrodos de la piel
·  Desconectar el aparato y retirar los electrodos
·  Limpieza y desinfección de todos los electrodos.
Indicaciones
·         Afecciones inflamatorias musculoesqueléticas agudas
·         Las adherencias
·         Cicatrices
·         Hiperhidrosis
Contraindicaciones
Las contraindicaciones de la iontoforesis son similares a las de la electroterapia de baja frecuencia unidireccional. Entre las principales contraindicaciones se encuentran la alergia al ión transferido, el embarazo, lesiones cutáneas, eczema, infecciones cutáneas, úlceras o erosiones cutáneas, zonas de hipoestesia por el peligro de provocar una quemadura sin advertirlo el cliente, isquemia, área cardíaca, tumores y marcapasos o dispositivos electrónicos implantados, así como la presencia de implantes metálicos en el área de tratamiento (osteosíntesis y endoprótesis metálicas). También se incluyen las piezas dentarias metálicas y los dispositivos anticonceptivos intrauterinos con parte metálica en las aplicaciones lumbares, pélvicas y abdominales bajas
Gimnasia pasiva
La corriente excitomotriz capaz de producir contracciones musculares, es una corriente variable que se aplica periódicamente a modo de trenes de impulsos, modulados o no, a través de los electrodos.
El número de impulsos en un segundo, determina la frecuencia de la corriente. La frecuencia (2.500 Hz) de contracciones puede variarse y se logra a costa de variaciones del periodo de reposo.
Se deben tener en cuenta las características propias del cliente, ya que la corriente excitomotriz debe atravesar piel, zona grasa subcutánea y otras posibles estructuras para llegar al músculo. Cuanta mayor resistencia encuentre, mayor intensidad debe aplicarse.
Cuando se quiera estimular músculos profundos o separados de los electrodos por una importante capa adiposa, se utilizará la forma intensiva (no modulada); si se quiere estimular músculos superficiales o cuando la capa adiposa sea escasa, se utilizará la forma suave o exponencial (modulada).
Parámetros:
·         Tiempo por sesión. 20 a 30 minutos.
·         Frecuencia. 2.500 Hz.
·         Trenes de impulso:
o    Modulados (músculos superficiales).
o    No modulados (músculos profundos).
Efectos
·         La gimnasia pasiva que se realiza, actúa provocando un aumento del tono muscular, lo que la hace indicada en flacidez e hipotonía muscular.
·         Sobre el metabolismo local produce un aumento del mismo, con aumento de los intercambios metabólicos.
Montaje
·         Ubicar los electrodos en lugares donde se encuentren los principales grupos musculares del cuerpo; pues esto no solo ayuda a ejercitar esta zona, sino también evitar que algunos músculos menores puedan atrofiarse.
·         Es bueno tener en cuenta mantener el sistema de electroestimulación ubicado lejos de la zona superior del cuerpo, teniendo como limite el pecho, pues estas estimulaciones al efectuarse cercanamente a la parte cerebral pueden atrofiar algunas terminales nerviosas.
·         Colocar los electrodos en dos o menos grupos musculares al mismo tiempo, con el fin que el cuerpo no sobrecargue el sistema nervioso central.
Indicaciones
·         INDICACIONES TERAPÉUTICAS DE LA ELECTROESTIMULACIÓN
o    Procesos dolorosos de origen muscular y nervioso (Neuritis, Mialgias, Dolores articulares)
o    Hipotonías musculares
o    Atrofias musculares
o    Reeducación de la coordinación neuromuscular
o    Lesiones de la medula espinal
o    Parálisis faciales y corporales
·         INDICACIONES ESTÉTICAS DE LA ELECTROESTIMULACIÓN
o    Reafirmación muscular
o    Aumento del tono y elasticidad de la piel
o    Aumento de masa muscular
o    Evita la flacidez secundaria en procesos de adelgazamiento
o    Es coadyuvante en procesos de eliminación de celulitis
o    Drenaje linfático facial y corporal
Contraindicaciones
·         Pacientes con marcapasos
·         Pacientes con enfermedad cardiaca, a menos que sea remitido por orden médica.
·         Pacientes con epilepsia, a menos que se aplique bajo supervisión médica.
·         Después de una intervención quirúrgica mayor
·         Sobre venas varicosa
·         No se debe aplicar sobre tejidos especializados: testículos, ovarios, corazón
·         Durante la menstruación o en días próximos a la misma
·         No se debe irradiar cartílagos en formación, en niños ni en jóvenes en edad de desarrollo
·         Tromboflebitis
·         Coagulopatias y hemorragias, ni en pacientes heparinizados
·         Ojos, oídos, dispositivo intrauterino
Alta frecuencia
Se trata de corrientes de elevada tensión y baja intensidad. En estética se utiliza una corriente alterna con una tensión entre 30.000 a 40.000 voltios y una frecuencia de 150 a 200 Kc (Kilociclos). 100000 Hz a 1 MHz
Las aplicaciones de la Alta Frecuencia son de tipo monopolar, se trabaja con un solo electrodo sobre la persona a tratar y no existe electrodo de cierre. El circuito eléctrico se completa a través de la capacidad del aire.
Hay dos tipos de electrodos:
·         Azul: al vacio
·         Naranja: Neón
Efectos
Los efectos dependen del método de aplicación que se emplee:
·         Efluvios o aplicación directa. Se utilizan preferentemente electrodo de superficie plana.
Su aplicación es directa sobre la piel, efectuando un suave masaje por toda la superficie a tratar. Tiene un efecto calmante, descongestivo y bactericida.
·         Chisporroteo o aplicación del electrodo a distancia. Se mantiene el electrodo a una pequeña distancia de la piel, consiguiendo una serie de chispas que producen ozono. Tiene efecto antiséptico, Hiperemiante, estimulante, cicatrizante y bactericida
·         Chisporroteo indirecto o masaje indirecto. En el mango portaelectrodos se colocará el electrodo metálico que la persona sostendrá en su mano, de esta forma la corriente pasará a través de su cuerpo, llegando a las manos de la esteticista, que actúan como electrodos, realizando rozamientos, amasamientos, o aquellas maniobras más indicadas para el tratamiento.
Efectos fisiológicos:
·         Térmicos, se produce por el paso de un arco voltaico desde el electrodo a la persona tratada, dejando sobre la piel una cierta cantidad de energía en forma de calor. Es capaz de actuar sobre el metabolismo produciendo un aumento del mismo y mejorando el trofismo celular.
·         Vasodilatador, estimulando la circulación periférica, produciendo vasodilatación e hiperemia.
·         Bactericida y antiséptico, la chispa o arco que pasa del electrodo a la piel, atraviesa la pequeña capa de aire que los separa produciendo el fenómeno físico de convertir el O2 en O3, gas muy inestable que reacciona con diferentes compuestos provocando una oxidación que explica sus propiedades germicidas y antisépticas.
Indicaciones
·         Pieles átonas
·         Seborreicas
·         Acnéicas
Contraindicaciones
·         Procesos inflamatorios agudos.
·         Implantación de dispositivos intrauterinos en aplicaciones sobre la zona.
·         Durante la menstruación.
·         Sobre osteosíntesis y endoprótesis metálicas.
·         Procesos de calcificación incipientes.
·         Procesos infecciosos y abscesos purulentos -salvo cuando pretendamos su explosión-
·         Tuberculosis activa e inactiva.
·         Procesos tumorales
·         Sobre Sistema Nervioso Central.
·         Denervaciones totales.
·         Ganglios linfáticos infartados.
·         No aplicar en los ojos, el calor generado en el humor vítreo produce cataratas a largo plazo y aumento excesivo de la presión intraocular en el tiempo de aplicación.
·         No aplicar en los oídos donde hay líquidos contenidos en cavidades no elásticas, con el riesgo de provocar compresiones en las terminaciones nerviosas.
·         No aplicar sobre área cardiaca.
·         Marcapasos cardíacos.
·         No aplicar en hematomas roturas tisulares ni derrames recientes y agudos.
·         No aplicar en tromboflebitis ya que puede liberar y diluir parcialmente coágulos y trombos.
·         No aplicar en testículos.
·         No aplicar durante procesos de gestación.
·         En presencia de fiebre.
·         En pacientes hemofílicos.
·         No aplicar en tratamientos con anticoagulantes.
·         En articulaciones con artritis séptica, artritis y artrosis en fase aguda, derrames articulares